lunes, marzo 10, 2008

Asesinos. 300.000 veces asesinos.

Todos los años, el gobierno canadiense autoriza la masacre de cientos de miles de crías de focas.

Hoy faltan algo más de 17 días para que focas como esta
o esta:

terminen de esta manera:
El gobierno Canadiense dice que las focas comen mucho balacao, y que por eso es necesario diezmar la población anualmente. Lo siguen diciendo aunque los cazadores dejan agonizar durante horas, encharcadas en su propia sangre, a crías de foca que aún no han recibido su primer baño, y no han comido un bacalao en su vida.

Y las dejan desangrarse, porque cuantos más tiros de bala tengan, menor será el precio de su piel. Por eso tampoco las rematan. Un grupo de veterinarios que acudió a Canadá, invitado por el Fondo Internacional para el Bienestar Animal, durante el 2001 fue a la cacería e indicó que el 40% de los animales habían sido despellejados estando vivos.

En 2006, se ejecutaron 300.000 focas en semanas. Casi 90.000 en tres días.

A pesar de que el Ministerio de Pesca canadiense insiste en que las focas devoran el bacalao y que ésa es una de las principales causas para la casi desaparición de la especie, los científicos no han sido capaces de demostrar esta teoría y las organizaciones ecologistas la califican de "cuentos".

En estos enlaces podéis obtener información más completa sobre este asunto.

Asociación altarriba


El ecolo

Protect Seals

Yo no sé si se podrá hacer algo para detener esto, pero cuanta más gente lo sepa, mejor.

Yo viajo. ¿Tú viajas?

Hace mas de un año, concretamente en Septiembre de 2006 (como pasa el tiempo, ¿verdad?) escribí en un post lo siguiente:

"A veces uno se queda, o al menos yo me quedaba, sentado en la terraza de alguna ciudad que no es la nuestra, viendo pasar gente a la que no conoces, ni te conocen, intentando adivinar de donde vienen, con que propósito caminan..

Me gusta eso, esa sensación de impunidad, de invisibilidad que dan las ciudades ajenas, donde nadie te mira, donde no esperas encontrar a un conocido... Esa es la grandeza, la búsqueda, la posibilidad de encontrar a quién será un amigo en el próximo tren, la próxima ciudad, la siguiente habitación...

Yo viajo, al igual que aquellos que he conocido durante este mes, y también durante el tiempo que caminé y bebí chocolate caliente en Dublín, para conocer.

Conocer, desde el convencimiento de que conocer es conocerse, ubicarse dentro del mundo, en relación a él.

Viajo con la intención de llenarme los ojos de cosas nuevas, de olores nuevos, de lugares que extrañar, de personas a quien recordar con una sonrisa.

Sólo el viajar, el experimentar lugares y costumbres nuevas, nos enriquece realmente, nos abre puertas dentro de nuestra mente, derriba nuestros prejuicios, dinamita nuestras barreras, y las de los otros.

Sólo después de deambular perdido en una ciudad extraña en idioma y rincones, sólo entonces seremos capaces de ponernos en la piel de quien deambula por nuestras calles. Y apreciar el valor que supone el hacerlo.

Unicamente después de contemplar otros atardeceres, podemos valorar los nuestros; apreciarlos, compararlos, enorgullecernos, hacerlos realmente de nuestra propiedad. Y si después regresamos a casa, y seguimos pensando que nuestro pequeño rincón del mundo es el más bello, el más cálido, el que nos hace más felices, será una opinión tomada desde el conocimiento, y la aceptación, de que para otros, hay rincones igualmente bellos y cálidos.

Y ser capaces de relacionar banderas e himnos con una comida, un olor, un recuerdo. Despojar de su connotación primera y política la tela, y darle otra, la nuestra, única.

Y establecer lazos, recuerdos comunes con aquellos que ya nunca nos serán extraños, y que hablarán de nosotros de igual manera que nosotros lo hacemos de ellos al regresar, rompiendo estereotipos aquí y allí.

Viajar es darse cuenta de cuan parecidos somos. Y ese viaje, ese camino, es el único tal y como yo lo veo, para acercarnos a una verdadera unión de culturas, de pueblos que viven de maneras tan distintas, y tan iguales.
"

Sigo pensando lo mismo. El año pasado no pude coger la mochila y largarme (¡maldito Euribor!), pero este año planeo un viaje en condiciones similares a aquel interrail. O no tan similares. Os cuento:

Serán menos días (unos 10-11), y no tantas ciudades. Mi idea general sería algo así como Santander-Milan-Frankfurt-Londres (o Dublin)- Santander.

El itinerario sería más o menos este, aprovechando que Ryanair tiene vuelos directos entre todas las ciudades, y que se puede ir de un sitio a otro por 4 euros. Bueno, en realidad no son 4, sino unos 150 leuros por todos los vuelos. Pero no es muy caro, ¿no?

A lo que vengo vengo... ¿Alguien se apunta? No será un viaje excesivamente cómodo, porque soy un pitufo pobre (pero honrao) y dormiríamos en albergues. Pero mi experiencia en ellos es realmente buena. Puedes pagar 12 euros por noche, y suelen ser limpios y con gente muy maja.

Y lo que te ahorras en alojamiento y transporte te lo puedes gastar en otras cosas. :-)

Pues eso, que se abre el plazo de inscripción, que durará hasta final de abril. Si alguien está interesado....

Perdón por la ausencia

Resulta que he estado las dos últimas semanas liado, tratando de aprender como funciona el Joomla, para colgar la página web de la empresa. Y eso, quieras que no, distrae un poquillo.

Pero en fin, ahora que más o menos ya está funcionando (aunque sea a un 70%) y solo quedan algunas cosillas más por añadir, puedo volver por estos andurriales.

Que espero que también sean vuestros andurriales.

Lo dicho, que nos leemos. :-)