jueves, septiembre 27, 2007

El cumple del Toro

Mira tú por donde... El Toro de Osborne cumple 50 añazos. No sé a vosotros, pero a mi me encanta.

Me alegré hace años, cuando no hubo manera de sacarlo de nuestras carreteras y se le declaró de "interés estético y cultural".

Desde pequeño, cuando iba con mi padre en el camión, siempre era una sorpresa, y un punto de referencia.

Son esas cosas a las que coges cariño de una forma totalmente irracional, y tremendamente absurda. Estamos de acuerdo. Pero ahora, cuando conduzco yo (coches, lo de los camiones va a ser que no), o viajo en autobús, y la enorme figura se recorta a lo lejos, me gusta verlo.

Quizás simplemente porque me recuerda a cuando era más pequeño, y los viajes por carretera era solo una sucesión de líneas discontinuas y árboles a ambos lados de la carretera, y lo único que de verdad me decía que avanzábamos era esa silueta rompiendo el horizonte.

viernes, septiembre 07, 2007

Ciao, Luciano

El periódico, la radio, la televisión... trajeron ayer la noticia de la muerte de Pavarotti. Nos vamos quedando sin mitos, sin divos, sin artistas. Nos quedamos huérfanos de la voz de Luciano, nos quedamos sin su Nessun Dorma.

No soy aficionado a la ópera. Supongo que se lo que la mayoría, o tengo nociones muy básicas. Sin embargo, cuando me enteré de la noticia de su fallecimiento, me entristecí. De los Tres Tenores, fue siempre mi favorito. Quizás por esa vitalidad que parecía derrochar, ese pañuelo blanco ondeando en el escenario... Tal vez porque una vez leí una entrevista en la que Plácido Domingo decía que le fascinaba Luciano, capaz de cantar como sólo él podía hacerlo, sin saber siquiera leer música. Quizás eso lo humanizó. No se.

Igual lo que ocurre es que no es necesario saber o entender para emocionar, para emocionarse. Para transmitir.

Los puristas afirman que Pavarotti pasó de ser un tenor a un icono, que dejó de cantar ópera para actuar en macro-conciertos y eventos de diversa índole.

Puede que si, puede que no. Sinceramente, no me importa. Pienso que tal vez, gracias a esa popularización que el artista italiano optó por seguir, la ópera, su arte y su voz, llegaron a donde no lo hubiesen hecho encerrados en las paredes de la Scala de Milán.

En cualquier caso, quizás la cuestión no sea si Pavarotti había dejado de ser un tenor o no. Nos deja el recuerdo de su gran humanidad, de su colaboración en causas benéficas, en ayuda a la infancia, con entidades como la Cruz Roja. De su sonrisa, de ese buen humor que se le intuía y debía ser cierto, ya que aquellos que lo conocieron lo confirman.

La magnifica voz que logró el reconocimiento del mundo, que entró en el Guinness por la ovación más larga de la historia (una hora y siete minutos en la Ópera de Berlín en 1988), que derrochó técnica y sentimiento para causas solidarias allí donde se le reclamó, se ha ido. Y desde ayer la música está un poco más silenciosa.



Nessun Dorma, Pavarotti, Paris 1998

martes, septiembre 04, 2007

La primera beefeater

Leo en el periódico que la simpática Moira Cameron es la primera beefeater de la historia. Dejando a un lado lo adecuado de poner a una escocesa a cuidar las Joyas de la Corona (ejem) me gustaría aprovechar la noticia para abrir un pequeño debate y una encuesta.

Vamos por partes, que dijo Jack. Me alegro por Moira. Después de 22 años en el ejército, ahora va a cobrar 29.600 euros anuales, y tendrá un apartamento a orillas del Támesis. Supongo que para ella será un trabajo bonito, y estará super contenta. Repito, me alegro por ella.

Cada vez más, las mujeres están teniendo acceso a profesiones y puestos a los que antes, por diversas cuestiones, no podían acceder. Las asociaciones feministas se dan palmaditas en la espalda y todas están encantadas de conocerse. No hay nada malo en que una mujer quiera ser beefeater, o cualquier otra cosa. Partiendo de la base de que todos somos iguales, pues la regla de tres es simple, ¿no? Todos iguales, todos iguales derechos. Perfecto. :-)

Ains, pero es que resulta que igual no es todo tan perfecto, tan guay, y tan "flower power".

Porque los mismos a los que se les llena la boca hablando de la igualdad entre hombres y mujeres, son los mismos que luego no son consecuentes. Tomemos, por ejemplo, este artículo: El Ayuntamiento de Madrid rebaja las pruebas físicas de bomberos para que haya mujeres.

No se, no lo acabo de entender... Si somos iguales, ¿porque hay que rebajar nada? ¿Por qué motivo, en el ejército, hay dos baremos físicos?

En esta otra noticia, se especifican las diferencias entre las pruebas de unos y otros. Así, se puede leer: La gran dificultad para las mujeres reside en las pruebas físicas. No existen casi diferencias entre las marcas a batir por unos y otros. Así, por ejemplo, si a los varones se les exige recorrer 1.000 metros en 3 minutos y 5 segundos, a ellas, en 3 minutos y 40 segundos. CC OO pretende que en las próximas oposiciones (64 plazas), tras el verano, las mujeres dispongan de tiempos mayores en las pruebas físicas.

¿Pero no éramos iguales? ¿Entonces? Quizás lo que ocurre es que no somos tan iguales. Y eso no tiene porque ser necesariamente malo. No lo es porque si una mujer no puede subir por una cuerda a la misma velocidad que un hombre, o un hombre es más lento que otro hombre, lo único que demuestra es eso, que es más lento. No menos inteligente, ni menos capaz para otro trabajo, ni menos merecedor de los derechos (y deberes) básicos e inherentes a cualquier ser humano. Simplemente que, para ese trabajo concreto, está menos dotado.

Lo que no es lógico, según mi punto de vista, es que para favorecer una supuesta igualdad se bonifique con un plus a quien no llega. Si esto no sería aceptable en unas oposiciones para trabajar en una biblioteca, aún cuando hay estudios que demuestran las diferencias entre el cerebro de hombres y mujeres, ¿porque lo es para un puesto donde los aspirantes van a arriesgar su vida, tratando de salvar a otros?

No lo acabo de entender, ya digo. Sólo se que si un día estoy en un incendio, prefiero que cargue conmigo un bombero, porque esos 40 segundos de diferencia, pueden ser muchos. ¿Y vosotros?

sábado, septiembre 01, 2007

Nuevo inquilino en la seta



Hacemos la presentación en sociedad de Charlie, que ha venido a ocupar la mitad de mi sala, y tiene repartidos por mi cocina su saco de comida, sus bolsas de cortezas para la jaula, y una casa sin hipoteca.