Sin embargo, eso no es inconveniente para que nos vayamos preparando, porque ya sabemos que aquí, de un dia para otro, el tiempo cambia que es una barbaridad.
Así que, con la inestimable ayuda de Boquerona (de verdad, de verdad, de verdad, me ha encantado, tendrás pastelillos de cocholate hasta que te hartes...) Emilio y yo nos vamos preparando para los rigores del invierno.
Espero que vosotros vayáis haciendo lo mismo, que luego pasa lo que pasa...
No hay comentarios:
Publicar un comentario