Estamos donde queríamos

Hay veces en la vida en que debería estar permitido soñar. No hablo de grandes sueños, de esos imposibles, ni de cosas que nos vayan a cambiar la vida. Al fin y al cabo, nuestros problemas, pequeños y grandes, seguirán estando ahí mañana, y pasado mañana, y será tarea nuestra enfrentarnos a ellos. A nuestras facturas, nuestros miedos, nuestras penas... Al fin y al cabo, solo es fútbol.

Pero, como digo, en ocasiones debería estar permitido soñar. O, mejor dicho, nosotros deberíamos abandonar ese pesimismo tan nuestro, tan Villaamil, y pensar que si, que esta vez si que nos toca...

El miércoles España se juega el pase a la final del Mundial contra Alemania. ¿Estamos donde queríamos? Yo creo que si. Cierto que el rival será seguramente el equipo que mejor está jugando en este campeonato. Cierto que no es la Alemania que perdió la final de la Eurocopa ante España hace dos años... Pero estamos donde queríamos..

Otros, acostumbrados a ganar, ya se fueron. Argentina, Brasil, Italia, Francia.. hicieron las maletas antes de tiempo. Nosotros no. Quizás nuestro fútbol no ha sido todo lo brillante, todo lo espectacular que preveíamos. Pero, así con todo, estamos a un paso de la final de un Mundial, por primera vez en nuestra historia.

Y enfrente está Alemania. Y eso carga de épica el paso a la final. No jugamos con una selección menor. No es un rival fácil. Pero no deberíamos tener miedo. ¿Son mejores que nosotros? Yo creo que no. Ni individual, ni colectivamente. ¿Tienen más ganas de jugar esa final? Sinceramente, lo dudo..

Tenemos todo en nuestra mano. El momento, la oportunidad, el equipo, las ganas... 90 minutos pueden llevarnos a una final que hemos soñado durante ya demasiados años. Definitivamente, estamos donde queríamos.