viernes, octubre 08, 2010

Va de despidos

Estaba yo leyendo el periódico, porque mañana es viernes y como todos los viernes, no voy a tener tiempo de ná, para poder cerrar la semana a la hora, cuando saltan a la pantalla dos noticias que, aún siendo diferentes, tienen el despido como punto de encuentro.

La primera, es que al pobre Llongeras, su hija le ha dejado en la puta calle. Con burofax y todo. Eso, en mi pueblo, se llama actuar con premeditación y alevosía. O, siendo más castizos, ser cabrón y retorcido.

Yo, qué queréis que os diga.. No es que me alegre, que a mi este hombre nunca me ha puesto la mano encima (a Dios gracias) pero es un personaje que me ha parecido siempre un poco jeta. Eso de poner a cualquier pobre incauta que se preste el pelo como un nido revuelto, y encima soplarle un pastizal...

El caso es que la hija ha debido aprender que el camino más rápido para hacerse rica no es crear su propio imperio, sino darle a su padre 6000 euros y meterle en una bolsa una selección de champús y un par de peines.. Que para él será lo más parecido a cuando a cualquiera de nosotros se nos acaba el contrato temporal, y recogemos los dos bolis y el taco de post-it de la mesa... ¿Pero el hombre este no veía que sus hijas y la ex iban acumulando acciones? ¿Tanto coloca la laca, que le han pillado con los bigudís al aire?

La segunda noticia es más curiosa. Resulta que el bueno de Mohamed dice que el jefe le puso en la calle por no querer cambiarse el nombre. Hombre, yo esto la verdad es que no sé como tomarlo..

Por una parte, quizás sea cierto que el nombre de Mohamed para el tema del telemarketing igual no es el más apropiado. Y que lo mismo el jefe del muchacho lo que hace es mirar por el negocio, del que en primera instancia come él y, por qué no decirlo, también Mohamed. Bueno, éste comía, que ahora ya está con Llongeras viendo crecer la hierba...

Pero claro, por otro lado, el muchacho dice que a qué fin tiene él que dejar de llamarse Mohamed, un nombre tan resultón, porque al jefe lo diga, y pasar a usar un nombre tan anodino y vulgar como Alexandre. Que esto no es una barra americana, donde las chicas adoptan nombres de guerra en plan "Hola chato, me llamo Sophie y por 15 euros más, el nombre me lo pones tú". Que siempre hubo clases y que a la Virgen ni tocarla...

Sobre todo porque, fijaos en la combinación: Mohamed Lamour. Eso en Francia no sé, pero aquí es un nombre que no tiene desperdicio.. Mojamé Lamur. Repetidlo un par de veces, ya veréis que sonoridad... Y, una duda que me ronda la cabeza.. ¿Será familia de Pepe?

En fin, que el uno que si, el otro que no, de resultas de todo ello, el amigo Mohamed se fue a la calle.

Esta la cosa jodida, gargameles... Ya no es cuestión de saber hacer una permanente, o vender guisantes congelados al mejor precio.. Ahora a la que te descuidas, y si no te andas con ojo, te apuñalan por la espalda con unas tenacillas, o le dan tu puesto a un Antuán cualquiera.

Avisados estáis.

4 comentarios:

Wenanena dijo...

Si es que en tal de despedir... y trincar pasta todo vale

Elvis dijo...

Pues a mi me da pena de Llongueras..., bueno en realidad siempre me ha dado pena... desde que le conozco. El lavado de pelo ya no va a ser lo mismo...snif!.

Saludos cordiales.

Gata dijo...

Sí, sí, está la cosa malita, malita... Ahora ya, te despiden a la mínima excusa. Que tú eres del Barça y tu jefe del Real Madrid... Pues hala, DESPEDIDO!!!!
Tampoco será tanto, pero sí, se están haciendo muchos despidos improcedentes... la puñetera crisis, ya se sabe.
A mí LLongueraas tampoco me ha caído nunca demasiado bien, pero debo decir en su defensa que vaya hija (de p**a) tiene!! Si es que... cría hijos... y te dejarán en la calle!!
Pero como tú dices: ¿no se daba cuenta este hombre de que la ex y la mujer estaban tomando el control de la empresa que él levantó?? Ayyyy, no sé yo la laca, pero el líquido ese que ponen para hacer la permanente, coloca, pero mogollón... Va a ser eso, no?

Y me encanta Pepe L'Amour!!! es taaaaaan... empalagoso! :)

Besos!

Pegasus dijo...

Wenanena.. Ya te digo, estamos en un plan que casi mejor intentar pasar desapercibidos..

Elvis, no me digas que te arreglaba el tupé el bueno de Llongeras!

La gata.. Una cosa es la crisis y otra que haya gente muy cabrona por ahí..

Por cierto, a mi también me encantaba Pepe L'Amour.. Tan insistente, tan apasionado.. Ahora, en estos tiempos de "políticamente correcto" seguro que Penélope no tendría dificultad para denunciarlo por acoso.. Ains.. Que triste pena..